Por: Isabel Recavarren
@irecavarren

No lo conocemos, todos hablan de él, conocemos sus obras, es el patriarca peruano originario de Nazca, que estudió en Lima ingeniería industrial, ganó una beca del SENATI, gracias al Convenio peruano-belga, para hacer un Máster en Ingeniería textil, era su especialidad. Archy Escajadillo, llega a Bruselas, tiene 30 años, se queda un año para cumplir los estudios, va a los Estados Unidos, donde profundiza el conocimiento de la industrialización, pero, de pastas para alimentos, trabaja en un restaurante francés. Casado con Marisol Basalardera, con un hijo Vladimir Escajadillo. Apasionado por la carrera, pasión que realizó con sponsor. Regresan al Perú, Archy toma la decisión, junto con Marisol, que es mejor vivir en el extranjero.

Todos vuelven a Bruselas, Vladimir tiene 7 años, nació en el ’81.

Se cambia el rubro, no más textiles, con la experiencia norteamericana abren un restaurante: ARCHY’S con el Colibrí. Se volvió cocinero, una empresa propia, el restaurante tiene éxito, situado en Rue Solvay, con una clientela belga pero sobre todo norteamericana. Proponen una cocina latinoamericana porque “la cocina mexicana estaba asentada en el gusto belga.” Los platos peruanos son tres: cebiche, lo preparaba con el pescado belga cabillaud o bacalao, usaba el limón verde brasileño, el ají africano en poca cantidad; seco de cordero y ají de gallina. Además de platos mexicanos, más, un plato de cada país latinoamericano.

Con una clientela de 50 personas, atendidos sobre todo en inglés, idioma ganado en la estadía norteamericana.

En el ‘99 cambian de local, compran propiedades, en su casa abren otro restaurante. La relación sentimental de la pareja termina, no obstante, el proyecto familiar continua.

Mientras, un cliente del restaurante se enamora de Marisol, son pareja desde hace 25 años. Marisol y Stefan Olvreths se casarán dentro de poco, luego de haber cumplido 25 años de romance. Olivier se ha integrado a la familia, todos trabajan juntos, Marisol nos asegura, «nunca ha habido conflicto entre nosotros». 

Stefan Olvreths y Marisol Basalardera, dentro de poco esposos. 

Archy da un cambio a su actividad, cambia su producción al BIO, ya habían introducido productos típicos peruanos como la Quinua, Un trabajo solitario, con el deseo de imponer un estilo de cocina propia, siempre, sin apoyo institucional. Vladimir tiene ya 18 años, entra a trabajar en el Conrad Hotel, considerado el mejor hotel de Bruselas, hoy Steigenberger Wiltcher’s. Luego de iniciar una prometedora carrera en la Hotelería, decide dejar la estructura para seguir el camino de sus padres. 

Introducen las “empanadas de quinua”, está en camino la patente, una fórmula secreta que le ha permitido tener la exclusividad de este producto, empanada de quinua con carne y con pollo.

Preguntamos a Marisol¿Cuál es su recomendación para conquistar el mercado europeo?

En nuestro caso, siempre hemos trabajado introduciendo el gusto peruano, con nuestros platos. ¿Conquistar el mercado europeo? con la cultura peruana, la música, las artes, hacer conocer nuestro país de otra manera, el Perú no es  solamente pobreza, tenemos también riqueza, hacer ver niños pobres sin zapatos, con pantalones caídos para que después vengan los belgas a preguntarnos si comemos con cuchara y tenedor, si las Llamas están en el aeropuerto. Hay que incentivar al turista a conocer nuestra belleza, nuestra cultura Inca, la que nos han dejado nuestros antepasados, una cultura muy organizada.

¿Usted ha llevado extranjeros al Perú?

En algunas oportunidades, he llevado un grupo de gente belga al Perú. Ahora, con motivo de nuestro matrimonio, estamos organizando nuestro “Matri-Trip” el matrimonio va a realizar un viaje. Tenemos un grupo de amigos y familiares belgas que llegarán al Perú. Con tal motivo, hemos escogido algunos lugares para hacer turismo, estos son: Paracas, Nazca, Arequipa y Macchu Picchu. Asistirán todos, menos Archy.

¿Cuál es la clave del éxito de una actividad empresarial?

En nuestro rubro, hacemos una comida lo más natural posible, con buenos ingredientes y además hacemos una comida fusión, la comida peruana se presta para ello. Utilizamos la quinua, además de otros ingredientes para darle otro sentido a los platos. Esto, permite hacer conocer nuevos ingredientes, la comida no es sólo papa y arroz.

Tienen una clientela que los sigue ¿cómo surge el trabajo de territorialidad a nomadismo?

Me enfermé y no pudimos continuar a trabajar en pareja cotidianamente. Cerramos nuestro restaurante, ahora lo tenemos alquilado. Al cierre nos empujó también la crisis, en el 2000 – 2002 muchos restaurantes cerraron. Por eso iniciamos a hacer Festivales de Estación, uno fue Bruselas Playa, Fiesta Latina, el Marché Biologique. Así, nos convertimos en nómades, con nuestra exclusividad: las «Empanadas de Quinua»

Sabemos que acaba de volver del Perú ¿qué cambios ha encontrado?

Acabo de volver del Perú, la comida la han puesto en un nivel muy alto y los cartelones aparecen por toda la ciudad ofreciendo comida, han arruinado la ciudad. El tráfico de la ciudad es terrible, no sirve tomar un taxi porque es igual al ómnibus. Lo que ha mejorado, es la arquitectura, es impresionante. La Lima antigua se está perdiendo, lo que ha quedado tiene unos colores que desentonan. La percibo muy monetaria, todo es restaurante, el problema es que hay tanta prostitución. Hay dinero, la economía ha mejorado. Ahora el problema es el venezolano que está rompiendo el mercado, como sucedió aquí en Bélgica con los polacos que rompieron el mercado del trabajo y el sector de limpieza se malogró, dejando fuera a los latinos.

Nos despedimos de Marisol, quien tiene un nieto del cual se siente muy orgullosa, es «cani-cross» al igual que su abuelo Archy, le gusta correr pero acompañado de un perro, es el representante de Bélgica en el campeonato europeo, se llama  Pablo Vladimir Escajadillo, quien lo cuida, es Archy.