Llegar al 2% del PIL nacional para lograr el «fondo de defensa» es lo que espera lograr, cada país de la Unión europea, en cumplimiento de lo solicitado en la OTAN. Bélgica está buscando completar esos fondos, debe aumentar el gasto del 1,3% al 2% del PIB antes del 2029 a fin de estar alineado con sus aliados continentales. Esto supone una dotación de 4.000 millones de euros que Bélgica deberá liberar. Circula la información que el Banco Nacional (NBB), Bélgica posee 227 toneladas del metal amarillo, por un valor aproximado de 20.000 millones de euros, y que podría vender parte de esta reserva. Por el momento está opción ha sido descartada.
Una opción es la venta de sus empresas a gestión pública que operan en sectores estratégicos. A continuación, se presentan algunas de las más destacadas:
Proximus: Principal empresa de telecomunicaciones del país, ofreciendo servicios de telefonía fija, móvil, internet y televisión digital. El Estado belga posee una participación mayoritaria en la compañía.
bpost: Empresa responsable de los servicios postales en Bélgica, que también ofrece servicios de logística y paquetería.
Infrabel: Encargada de la gestión y mantenimiento de la infraestructura ferroviaria belga, supervisando más de 3.500 kilómetros de líneas férreas.
Elia: Operador del sistema de transmisión de electricidad en Bélgica, gestionando la red eléctrica de alta tensión.
VRT (Vlaamse Radio- en Televisieomroeporganisatie): Organización de radiodifusión pública que proporciona servicios de radio y televisión en la comunidad flamenca.
SNCB/NMBS (Société Nationale des Chemins de fer Belges/Nationale Maatschappij der Belgische Spoorwegen): Empresa nacional de ferrocarriles que opera servicios de transporte de pasajeros y mercancías.
De Lijn: Sociedad pública de transporte de la Región Flamenca, que opera servicios de autobús y tranvía.
TEC (Opérateur de Transport de Wallonie): Empresa pública que gestiona los transportes en la Región Valona, incluyendo redes de autobuses y el metro de Charleroi.
¿Cuáles son los humores en el sector empresarial?
Consultado el director general de Proximus, Guillaume Boutin, refiere el diario Le Soir, confirmó lo ya expuesto por el presidente del operador de telecomunicaciones semipúblico, Stefaan De Clerck, «para el Estado, vender su participación en la empresa no sería rentable en este momento». Agregando Guillaume Boutin, «estamos en medio de este plan industrial» con fuertes inversiones para la instalación de fibra óptica, y todas estas inversiones «pesan en el precio de las acciones», que sin embargo deberían recuperarse en el futuro. Vender ahora no es por tanto la opción financieramente más interesante, además porque “hoy Proximus está desplegando un activo estratégico. Necesitamos un Estado como accionista de referencia en Proximus, a largo plazo.»
Pero más allá del sector empresarial, la población belga consultada en tres regiones del país, a la pregunta:
¿Debería el Estado belga vender empresas públicas como Proximus, Belfius y Bpost para obtener recursos financieros suficientes para Defensa?
La Wallonie, en 61% es contraria a la venta de las empresas públicas, le sigue Bruselas con el 56% y Flandes con el 50%.