«Cuarenta y cinco años han pasado desde aquel 16 de marzo de 1978 cuando en Roma, en vía Fani, los terroristas de las brigadas rojas secuestraron a Aldo Moro, presidente de la Democracia Cristiana, asesinando ferozmente a los cinco integrantes de su escolta.
Oreste Leonardi, Domenico Ricci, Giulio Rivera, Francesco Zizzi y Raffaele Iozzino sacrificaron sus vidas para proteger al estadista democratacristiano, luego asesinado bárbaramente el 9 de mayo de ese mismo año.
Una página dramática en la historia de la república que tuvo un profundo impacto en la política italiana y aún hoy representa uno de los momentos más dolorosos de la historia de nuestro país.
Es nuestro deber hoy recordar y honrar el sacrificio de quienes pagaron el precio más alto por defender heroicamente la Democracia y las instituciones que la representan.
El recuerdo de aquellos hechos y de los Hombres que, en años sombríos, lucharon por proteger a nuestra República contra cualquier intento de desestabilización, sigue siendo una fuerte referencia para todos aquellos que trabajan día a día por reafirmar los valores de la libertad y la justicia.
Con profunda e inmutable emoción dirijo mi pensamiento a las víctimas y mi cercanía personal y de todo el Ministerio del Interior a sus familias”.
Así lo afirmó el ministro del Interior, Matteo Piantedosi, con motivo del 45° aniversario del secuestro del presidente Aldo Moro y la masacre en via Fani.