NU. Andrés Duda, presidente de la República de Polonia

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Distinguido Secretario general,
Excelentísimo señor Presidente
Excelencias
Distinguidos y jefes de Estado y Naciones y Gobiernos
Estimados delegados
Señoras y señores,
no hace un año yo pronuncié mi declaración en esta misma instancia como presidente de un país de 38 millones de personas, hoy estoy en este podio sabiendo, que en mi país en Polonia, según varias cifras estadísticas, miden más de 40 o incluso 41 millones de personas, según  algunas buenas fuentes, esas 3 millones de personas más son sobre todo los refugiados ucranianos, nuestros vecinos, algunos son invitados nuestros y otros se desplazan entre Polonia y Ucrania.
Sin embargo, hay algo que todos ellos tienen en común, están refugiándose en nuestro país de la guerra y de la muerte, de la esclavitud, en la ocupación rusa tras la invasión rusa de ucrania. La guerra lleva ya más de 7 meses en marcha guerra provocada por la agresión rusa. Es una guerra en la que Rusia no es contenta con luchar contra el Ejército ruso, el ejército ruso está matando a civiles, se les está obligando a reubicarlos en su propio territorio
Russia destruye ciudades ucranianas, monumentos, escuelas, guarderías, hospitales, destruye cosechas y lacera el medio ambiente en Ucrania. Destruye literalmente todo aquello de lo que no se puede incautar o saquear, incluso amenaza no solo a Ucrania sino al mundo entero y en especial a Europa, con provocar una catástrofe nuclear, invocando fallos en una central nuclear.
La decisión de librar esta terrible guerra se vio alimentada por un sentimiento imperialista y colonialista, una arrogancia nacionalista exaltando al propio pueblo y negando el derecho a la libre determinación a sus vecinos soberanos, así lograron obsesionar a la nación que es la nación de uno de los Estados fundadores de las Naciones Unidas- nación que pudo, que tuvo la ocasión de protestar entre el disparate de sus dirigentes. Lamentablemente solo un puñado de ellos, los más valientes, pudieron alzar la voz en oposición a esta guerra como todos los demás conflictos del mundo son guerras que deben perder los agresores. En este caso, sin duda, lo reitero el Estado ruso.
Además, el agresor en cierto modo ya ha perdido, ha perdido porque no ha logrado someter a una nación libre, no ha logrado pisotear el espíritu de la nación ucraniana,  ha perdido porque no ha logrado dispersar al ejército ucraniano, ahora en su contra no tiene sólo al estado ucraniano sino a una nación de muchos millones de personas la mayoría de los cuales no quieren que se negocie nada con el invasor hasta que se retire de las tierras ocupadas de ucrania La mayoría de naciones del mundo están en contra lo han dicho alto y claro también en las resoluciones que se han aprobado en este lugar en las Naciones Unidas- mi país Polonia se opone a todo ello y que sepa Ucrania aquí y ahora que siempre podrá contar con Polonia
Señores y señores yo fui uno de los políticos que incluso antes de la guerra creía que Ucrania lograría defenderse, hoy estoy convencido de que Ucrania prevalecerá, de que los refugiados podrán regresar a sus hogares, de que se reconstruirá Ucrania, de que sus fronteras reconocidas internacionalmente serán recuperadas. Mi país, Polonia, sumando fuerzas con sus aliados hará todo lo que pueda para que así sea, pero hay otras facetas en esta guerra, tiene repercusiones económicas en muchos ámbitos. Hay una guerra paralela que ha librado Rusia, es la guerra contra nuestros principios y valores comunes en contra de nuestra humanidad y quiero hablar de ello hoy también, porque veo en este salón a representantes de muchos países conocidos de África, de Oriente medio y de Asia con cuyos dirigentes yo pude hablar justo antes de la guerra o durante la guerra. No se trata éste, de un conflicto regional, este conflicto, esta guerra de Rusia contra Ucrania ha atizado un incendio mundial, esta guerra repercutirá en nuestros países y en los de ustedes, eso en caso de que no lo haya hecho ya.
Presidente señoras y señores uno de los efectos más dramáticos mundiales de la agresión rusa, es la crisis alimentaria, el espectro de la hambruna que se cierne sobre muchas zonas del mundo. He debatido sobre el tema largo y tendido en recientes visitas a países de África occidental, Nigeria y Senegal. En esos países he debatido con sus dirigentes en cuanto a la seguridad alimentaria y las posibles repercusiones, de las restricciones a las exportaciones de cereales y fertilizantes de Ucrania y Rusia.
El tema,  también surgió en discusiones anteriores que mantuvimos con otros presidentes de Europa central y oriental, con dirigentes también de África, de Oriente medio y de Asia. También recuerdo perfectamente una conversación con el Secretario general de las Naciones unidas, el señor
Antonio Guterres a altas horas de la noche, cuando el secretario general estaba de camino a Ucrania para debatir los problemas relacionados con la alimentación. Gracias señor por su ahínco, por su compromiso, por su voluntad y por el valor que usted tuvo señor Secretario general. De lo más necesario en estos momentos tan difíciles para poder representar a la comunidad internacional reunida en esta que es la mayor organización del mundo.
Señoras y señores desde el inicio de la invasión de Rusia de manera deliberada y cínica ha destruido cosechas material agrícola y la propia invasión ha reducido drásticamente las cosechas ucranianas, los datos lo dejan claro. Rusia, en cada ataque a los territorios agrícolas que suponen el 22 por ciento de todo el terreno agrícola de Ucrania, una quinta parte de la tierra, que es el granero de muchos países no europeos la tierra que produce casi el 30 por ciento de los cultivos de invierno apenas ha podido producir nada esta temporada o se han saqueado esas cosechas, no necesito aquí recordarle a nadie que Ucrania es uno de los mayores productores alimentarios del mundo, es el granero no  sólo de Europa sino del mundo entero. Según cálculos conservadores las cosechas ucranianas este año serán un 35 por ciento menos como consecuencia de la guerra.
Señoras y señores. insisto el 35 por ciento menos, más de una tercera parte del granero de grandes zonas del mundo ha quedado eliminada por la agresión rusa y quién va a sufrir sus consecuencias son pues quienes más necesitados están. Es un arma económica que utiliza como arma la alimentación y afecta sobre todo a África y a Oriente medio.
Llevo ya mucho tiempo en la política como para no ser ingenuo, esta es una política que Rusia lleva a cabo adrede, se calcula que como consecuencia de la guerra de Ucrania, la cantidad de personas que padecen hambre crónica este año aumentará en 47 millones de personas
e insisto sobre todo en África y en Oriente medio.
Esta catástrofe, esta hambruna catastrófica que provoca Rusia por su invasión de Ucrania, es allá donde será más obvia.
Excelencia señoras y señores,
como comunidad internacional tenemos la obligación de evitar que nadie en el siglo 21 de manera cínica y adrede provoque hambrunas artificiales para lograr sus objetivos políticos como hizo Stalin en los años 30, en este contexto es crucial que el 22 de julio en Estambul, Rusia y Ucrania firmasen, en respectivos acuerdos con Turquía y con las Naciones Unidas- documentos que lo que buscaban era desbloquear la ruta marítima del mar del Mar Negro para la exportación de millones de toneladas de cereales ucranianos. Una vez más reconozco el papel significativo que tuviese el Secretario General de las Naciones Unidas en la conclusión de este acuerdo.
El señor Antonio Guterres,  es todo un éxito de la organización de las Naciones Unidas y de nuestro Secretario general en esta situación tan difícil. Ahora tenemos que velar por que las partes cumplan los acuerdos y su compromiso, me preocupa que cada vez Rusia diga cosas que menoscaban el acuerdo, cada vez con más frecuencia y además está cometiendo actos que condenamos de la manera más tajante posible como por ejemplo el bombardeo del puerto de Odessa, apenas 24 horas después de rubricar estos acuerdos.
Como comunidad internacional, debemos responder inmediatamente ante estos incidentes imponiendo más sanciones y ofreciendo más ayuda a Ucrania de lo que estás defendiendo, que se sepa que Polonia, junto con sus aliados de la Unión europea y como vecino se compromete a facilitar las exportaciones de cereales ucranianos también por tierra haremos todo lo posible para que ello llegue a quienes más lo necesita en especial en África, Asia y América latina y por doquier, para que puedan sobrevivir estas personas
Señoras y señores, distinguidos delegados,
ante los actos ilícitos de Rusia, debemos aprender una lección de cara al futuro, no olvidemos las disposiciones del derecho y la posibilidad de pedir cuentas a los perpetradores. Existen una serie de normas en el derecho internacional sobre la protección de los recursos alimentarios y el medio ambiente durante los conflictos entre otras cosas cabe citar  las disposiciones del artículo 11 del Pacto Internacional de Derechos económicos, sociales y culturales que reconoce el derecho fundamental de todo el mundo a vivir al amparo del hambre en el que los estados se comprometen a distribuir de manera equitativa los suministros alimentarios del mundo además el protocolo uno de los Convenios de Ginebra sobre la protección de las víctimas de conflictos armados internacionales de 1977, en su artículo 54, prohíbe entre otras cosas atacar y destruir eliminar o volver inservibles objetos que sean indispensables para la supervivencia de la población civil, como alimentos y zonas agrícolas. A su vez el artículo 55 del Protocolo obliga a los Estados a proteger el Medioambiente ante daños durante las hostilidades que russia destruye adrede la agricultura ucraniana, violando el derecho internacional. Probablemente no sorprenda a nadie acá, pero ante la barbaridad, la barbarie de esta guerra acaso las normas internacionales jurídicas ¿son una respuesta suficiente ante el enorme daño al medio ambiente y a la cadena alimentaria mundial? yo tengo muchas dudas al respecto, en este contexto veo que es necesario crear mecanismos de castigo para que en el futuro se pueda llevar ante la justicia a las personas responsables de conculcar el Derecho Internacional a quienes han destruido adrede las cosechas del granero del mundo deben saber que se les perseguirá para enjuiciarlos mientras vivan.
Desde aquí respaldó todas las iniciativas nuevas y existentes para que quienes privan a millones de personas de su derecho a la alimentación y destruyen el medio ambiente no queden sin castigo. Polonia, desea participar de manera activa en estas labores.
Señoras y señores señoras y señores distinguidas delegaciones la agresión rusa contra Ucrania supone poco menos que una agresión contra el mundo entero, cada agresión requiere de una respuesta internacional, multidimensional con determinación y sin duda es necesario ejercer más presiones a Rusia, ya su cómplice el régimen de Alexander Lukashenko en Belarús, sigue manteniendo colaboración con estos gobiernos, es algo que habría que volver a ponderar en especial también en las organizaciones internacionales no se puede permitir que Rusia siga haciendo más de lo mismo, esos tiempos de más de lo mismo acabaron y Rusia acabó con ellos en realidad con esta agresión contra ucrania vulnerando el derecho internacional y no respetando a las vidas humanas. Lo digo esto como hombre que el 23 de febrero visitó Kiev y que en aquel momento desde el inicio de la guerra, justo después de la agresión rusa a estado tres veces. Soy un hombre que he estado en Ucrania y que ha visto  los daños cerca de Kiev, hemos visto cómo se han destruido hogares, cómo se ha cercenado a la población civil, cuáles han sido las repercusiones de la agresión brutal rusa, la sangre en las calles, los soldados rusos disparaban a familias lo que hacían era intentar huir de la guerra en sus vehículos difícil de imaginar pero yo lo he visto con mis propios ojos, sé cuán enorme ha sido esa brutalidad y sé lo que significa esta agresión rusa cuando el presidente Zelenski dice o habla de la brutalidad rusa y habla de los miles de ucranianos que han muerto en manos de los rusos y lo digo esto aquí ante todos ustedes. Durante la Asamblea General de las Naciones Unidas como dirigente de un Estado cuyas fronteras cruzaron casi 6 millones de refugiados ucranianos desde que empezase la agresión ucraniana, nuestros niños van a la escuela con niños ucranianos hoy por hoy, estos ucranianos que han querido salvarlos y salvarse, nuestros nacionales han acogido en sus hogares a millones de refugiados, quizá muchos ustedes no se lo crean, no se creen que a pesar de que 6 millones de refugiados ucranianos han llegado a nuestro país y según nuestros cálculos 2 millones se quedan, están ahora en Polonia a pesar de todo ello no tuvimos que construir ni un solo campamento de refugiados no fue necesario, nadie vive en una tienda de campaña en Polonia, todo el mundo ha encontrado una vivienda digna y condiciones adecuadas en hogares y lugares especialmente preparados para ellos, hoteles internados otras ubicaciones temporales, no hay tiendas de campaña en Polonia donde vivan refugiados de la guerra. Todo el mundo tiene un hogar digno, todas las mujeres y hombres polacos conocen la situación en Ucrania,  todos los hombres y mujeres de Polonia reconocen claramente que significa la ocupación rusa, que significa la agresión rusa contra un estado, qué significa el terror ruso contra un Estado, porque  por la casa han vivido este terror desde la segunda guerra mundial. Cuando los rusos ocuparon Polonia y cuando Polonia estuvo al otro lado del telón de acero y cuando los patriotas estaban intentando librarse del yugo ruso y lucharon y se encarceló a muchísimas personas y se asesinó a muchísimas personas en 1939, justo después de la invasión de  la Alemania nazi por Polonia, el país que junto con el estado nazi invadió la red pública de Polonia y atacó a mi  país fue la Rusia soviética según un pacto entre Hitler y Stalin del 23 de agosto de 1939
La Rusia soviética ocupó el 50 por ciento de mi país y casi dos millones de personas fueron deportadas a lejano a las lejanas Siberia para morir centenares de policías y militares fueron asesinados, sabemos que los fusilaron, sabemos lo que es el terror ruso, la ocupación rusa por eso los polacos han ayudado a los licenciados ucranianos sin hacer preguntas ni el gobierno, ni yo el presidente de Polonia, no tuve que pedírselo que lo hicieran no tuvimos que rogarle a las personas espontáneamente fueron a la frontera para ayudar y para qué se pudiese acoger a los ucranianos que huían de la agresión rusa en sus hogares esa es la realidad, esa es la realidad de Europa central
Señor presidente, distinguidas delegaciones no olvidemos a los que sufren recordemos que seis meses de agresión rusa en Ucrania han provocado la mayor crisis humanitaria en Europa desde la segunda guerra mundial hizo un llamado para que se incremente la ayuda a la población civil ucraniana cuyas necesidades humanitarias son mucho
mayores que los fondos que en este momento están disponibles, se acerca el invierno, agravado por la guerra y por los precios de la energía será el invierno más duro en años como humanidad. No podemos darle la espalda a quienes más lo necesitan, nosotros como comunidad internacional no podemos sentir fatiga de la verdad tenemos que ayudar tenemos que apoyarlos tenemos que trabajar codo con codo para que haya una hoja de ruta de desarrollo económico y social para que las personas tengan esperanza en que la guerra puede ser un lugar mejor donde vivir a pesar de las cicatrices de la guerra de la pandemia de los desastres naturales polonia quiere colaborar en la creación de este programa incluso aquí en este foro en las naciones unidas- quizá por ejemplo como parte del Consejo económico y social
señoras y señores, quiero ciertas verdades para nosotros los dirigentes del norte rico o como nosotros nos llaman de occidente es muy positivo que hayamos estado a la altura del problema o creo que hayamos preservado nuestra unidad y que nos hemos comprometido a apoyar a la víctima y no al agresor, que Europa occidental hoy pueda señalar claramente quién atacó a quien, saben ellos que Rusia es el agresor y que Ucrania es quien sufre y está bien que haya una distinción positiva al respecto pero no seamos complacientes. En mis recientes visitas a África fui más consciente de algo que ya llevaba yo mucho tiempo pensando, ¿tenemos la misma determinación de las tragedias de Siria, Libia o Yemen? no volvamos a hacer más de lo mismo después de las tragedias de la República Democrática del Congo, las guerras en el Cuerno de África al tiempo que condenamos la invasión de Ucrania ¿estamos dando el mismo peso a la lucha contra mercenarios que quieren desestabilizar al Sahel y amenazar a muchos otros estados de África?
Creo que eso es lo que se puede aprender de esta guerra, si las Naciones unidas quien estar verdaderamente unidas ante cualquier respuesta a las vulneraciones del Derecho Internacional, debe ser algo idéntico basado en principios y de manera muy decisiva, el mundo con su sistema de vasos comunicantes, la víctima hoy es Ucrania pero si el imperialismo ruso se sale con la suya, mañana puede ser cualquier país del mundo, será otro quien expolie los cultivos de otro, será otro quien expulse a civiles y los asesinen. No podemos permitirlo, la postura de Polonia ante cualquier guerra es clara y no tiene ambigüedad posible, exigimos un respeto absoluto a las fronteras reconocidas internacionalmente, la inviolabilidad de estas fronteras es el elemento fundamental del orden mundial y esa es la condición necesaria para que haya paz en todos los casos. Ucrania es hoy la víctima, mañana cualquiera de nosotros podemos ser la víctima a menos que respetemos esas normas claras, a menos que obliguemos a que se respete el Derecho Internacional. Es obvio, Rusia debe a Ucrania reparaciones de guerra que tendrá que pagar, no puede haber justicia sin reparaciones, ello se aplica a cualquier país que esté saqueando a otro país, se aplica hoy. Pero, también se aplica a las cuestiones pendientes del pasado. Lo digo esto, como presidente polaco, como presidente de Polonia.
Polonia que experimentó los horrores de la segunda guerra mundial arruinada y destruida y que perdió a 6 millones de ciudadanos incluidos 3 millones de ciudadanos judíos señoras y señores, por ello, Polonia no debe dejar en sus esfuerzos de pedir cuentas a Rusia por su vulneración del derecho internacional tanto como Estado, como a escala individual esta guerra por debe resolverse de manera que el agresor pague por las pérdidas y daños que ha causado, se debe pagar por cada ser humano asesinado en ucrania,  por cada hogar destruido por cada escuela destruida por cada hospital destruido así tiene que ser, utilicemos nuestras facultades para garantizar que se juzga la culpa y se castiga a los culpables y estamos colaborando con la Corte Penal Internacional en la Corte Penal de Justicia para ver cómo identificar y perseguir a los perpetradores de la manera más eficaz.
Distinguido señor presidente señoras y señores,
en muchos casos en su historia el mundo ha enfrentado guerras que buscaban la partición por parte de enemigos de la libertad con ambiciones enfermas y el deseo de una dominación total. Los genocidios de Adolfo Hitler, de Stalin, de Paul Potts de la esencia de estas guerras no ha cambiado, siempre empieza con un culto la fuerza y a creer en la superioridad racial ideológica o de otro tipo de cualquier ser humano y es una persona de otra nacionalidad de otro país o de su propio país a veces sin embargo el hombre siempre alzó la voz ante la agresor y el genocida, de ahí surgió el hombre libre, la agresión hace que las personas tengan voluntad de resistir, el valor, la fuerza, la solidaridad y el deseo de pillar las víctimas y así tenemos que seguir y así tenemos que seguir haciéndolo como humanidad es la base de la naturaleza humana y Pericles lo dijo en su famosa oración funeraria ateniense: «la felicidad es fruto de la libertad y la libertad del valor el hombre y la nación puede pagar cualquier precio por la libertad y luchar hasta el final».
El hombre así defiende la dignidad humana ucrania para nosotros hace gala de un valor increíble por ello les pido a todos ustedes que no seamos indiferentes ante el heroísmo y la plena determinación de la lucha por la libertad, nunca mostramos indiferencia a cualquier nación que se defiende ante la tiranía y ante la falta de respeto a la humanidad porque así estaremos defendiendo a toda la humanidad contra esta tiranía y la visión del mundo donde solo la mano dura gana es algo erróneo e inmoral y además puede suponer algo que alardea al mundo entero.
Estoy convencido de que en este caso no es distinto, lo digo en el fuero de una organización que se formó tras la segunda guerra mundial no es casualidad que en 1945, los fundadores de las Naciones unidas- declarasen su intención de crear un mundo basado en el diálogo frente al
uso de la fuerza dura y bruta. No olvidemos este legado, no permitamos que estas tragedias pasen en el futuro como las que ya experimentó el mundo en el Siglo XX.