🇵🇪 prof. Marco Versiero, Leonardo, Roma y Milán 🇮🇹 Video

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Esta segunda parte de la entrevista al prof. Marco Versiero se refiere a la vida de Leonardo da Vinci, su obra, en dos ciudades Milán y Roma.

Para Milán, Leonardo era importante por las obras realizadas en el territorio Lombardo, la más importante era la Última Cena situada en el refectorio de la Iglesia Santa Maria delle Grazie, antes que saliera a la ribalta La Mona Lisa, debido al robo de la misma. La gran fama internacional de Leonardo artista y pintor, se debe a La Última Cena o El Cenáculo. Otro elemento que le brindó gran fama fue el Caballo Sforzesco, existió el modelo en terracota, el caballo fue destruido. Recientemente, una escultora japonesa lo ha replicado, su obra se encuentra en el Hipódromo de San Ciro.

El Caballo Sforzesco era una gran obra de Leonardo, nueve metros de alto y varias toneladas de bronce con una base terracota. Ludovico el Moro y Ercole D’Este deciden enfrentar la invasión de los franceses, el bronce previsto para la realización del caballo lo destinan a la artillería, mandándolo a Ferrara. Luego, los franceses, cuando ocupan Milán, como una demostración de denigración hacia la ciudad, el modelo del caballo en terracota fue objeto de punteria y viene destruido por los disparos.

Nos quedan los diseños, que reflejan el estudio dedicado por Leonardo para realizar esta gran escultura. La Última Cena, un trabajo experimental de Leonardo, estuvo también a punto de perderse debido a la preparación que tuvo el muro donde él pintó esta obra. Veinte años ha requerido su restauración, una restauración  que ha logrado recuperar los colores y redescubrir detalles de la pintura leonardesca gracias a la restauradora Pinin Brambilla.

Posteriormente, Roma representa el intento de Leonardo por encontrar una residencia final donde transcurrir sus últimos años de vida, con la intención de realizar un libro, ordena sus escritos con su alumno Francesco Melzi. Cree que Roma será su residencia final, Giuliano De Medici quien lo protegía le ofrece un hospedaje en Vaticano, en la Villa de Inocencio VIII, mientras era papa Giovanni De Medici o León X.

Lamentablemente, Leonardo no logra tener una buena relación con el Papa, ya sea por su método de trabajo que requería mucho tiempo. La ruptura se verificó cuando Leonardo continuó sus estudios sobre el cuerpo humano, ante estos estudios el Papa Leon X lo acusó por querer manipular los cadáveres. Esta situación lo llevó a aceptar la invitación de Francisco I a quien encontró en Bologna, decide de transferirse adónde pueda recibir, aunque sea en los últimos años de su vida, un tratamiento adecuado y dedicarse a sus estudios.

Nos refiere el prof. Versiero que una frase puede resumir el sentimiento de Leonardo al dejar Italia y partir para Francia.

Leonardo escribe, el 24 junio 1518 un año antes de su muerte: «Yo continuaré».