El bienestar financiero en América Latina

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La inclusión financiera es uno de los derechos que más se ha intentado promover en los países de América Latina y el Caribe, brindando un mayor acceso y uso de los servicios financieros para todos los segmentos de la población. A mediados del 2020, el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) publicó el informe “Determinantes del bienestar financiero: evidencia para América Latina”, cuyos resultados sobre el bienestar financiero son importantes de analizar en época de pandemia.

El análisis realizado por el CAF incluye a siete países de la región y el bienestar financiero promedio de la región asciende a 59 puntos. Chile con 66 y Colombia con 63 son los países con mayor bienestar financiero de la región. El puntaje de Bolivia se ubicó en el promedio de 59, mientras que los demás países se encuentran por debajo del promedio regional, teniendo a Argentina como el país con el bienestar financiero más bajo con 55.

En esta medición, el CAF realizó una encuesta (basada en la escala de bienestar financiero de la Consumer Financial Protection Bureau – CFPB) considerando las categorías de características individuales, características del hogar y la familia, ingreso, comportamiento de ahorro y crédito y buenas prácticas financieras. De esta manera, los resultados de bienestar financiero muestran tanto la oferta como la demanda financiera de cada país.

Según los resultados desagregados, se observa que las personas con un mayor grado educativo tienden a poseer un mejor bienestar financiero. Es así que la población que alcanza el nivel secundario obtuvo un puntaje de 58, mientras que los técnicos y universitarios obtuvieron 63 puntos.

En cuanto a la edad y sexo, no se encuentran diferencias significativas en global, con excepción de Chile, donde las personas con 30 años o menos poseen un bienestar financiero de 63, más bajo que otros grupos; mientras que las mujeres en Paraguay poseen un mejor bienestar financieros que los hombres. En el caso del estado marital, Chile y Colombia muestran que las personas casadas reportan un mayor bienestar financiero que las solteras.

En época de pandemia, donde se están empleando mucho más los servicios financieros, es importante analizar el bienestar financiero de cada país, pues así podemos ver las ventajas y falencias del sector y generar políticas de inclusión financiera que contengan las necesidades de la población.

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Doctor en Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad Autónoma de Madrid - España, Maestría en Administración (Universidad Autónoma de Guadalajara – México) y Maestría en Administración Pública (Instituto de Estudios Superiores en Administración Pública en México D.F.). Economista de la Universidad de Lima (1974). Decano de la Facultad de Economía durante 14 años, Director de la Escuela de Post Grado (3 años) y Catedrático Principal de Economía de la Universidad de Lima. Vocal de la Sala Especializada en Protección al Consumidor (agosto 2012 – agosto 2017). Actualmente, Gerente General de Asesoría y Negocios Financieros S.A. – ASFINSA, Director independiente de empresas privadas y Experto en valorizaciones económicas para la determinación del daño emergente, lucro cesante, costo de oportunidad y daño moral.