Hasta las 20 horas del domingo 7 de julio en París, el objetivo era: frenar la derecha, lo lograron haciendo alianzas innaturales. La coalición de izquierda fue la gran sorpresa, el Nouveau Front populaire – NFP obtuvo 182 curules; Ensemble, el partido de Emmanuel Macron obtuvo 168 curules y RN de Marine Le Pen obtuvo 143 curules, tres partidos principales, un resultado distinto al de las elecciones europeas, un resultado diferente a las previsiones de las encuestadoras cuyas proyecciones cayeron, como ellas, en confiabilidad. Ningún partido logró los 289 curules necesarios para gobernar solos.
En la sede del NFP resonaba la música de los Inti-Illimani antes que llegase un victorioso Mélenchon, un silencio sepulcral en la sede de RN y Ensemble respiró con prudencia, también, en silencio.
Se especuló que la retro-intención de Macron, cuando decidió disolver la Asamblea, era poner a prueba el probable gobierno de Le Pen-Bardella esperando que se “quemen” para la gran contienda política presidencial del 2027, que es el gran premio, el verdadero objetivo. No es un caso que Bardella, presidente de RN repitió en diferentes momentos “todo comienza ahora”.
Macron se mantuvo en el centro, a pesar de que su Ensemble perdiera ante RN en las elecciones europeas y en la segunda vuelta perdió ante NFP, perdió con la derecha y con la izquierda. En su primer discurso Mélenchon exclamó con vivacidad “la voluntad del pueblo debe ser rigurosamente respetada. El presidente debe aceptar su derrota y pedir al Nouveau front populaire de gobernar”. Anunciando que actuará su programa “abrogación de la pensión a 64 años, aumento del salario minimo legal a 1.600€ al mes”.
Mientras el presidente de RN, Jordan Bardella calificó la alianza de la izquierda como una “alianza del deshonor…. Que priva a los franceses de una política de relance” aseguró que RN “es la alternativa para Francia y estará siempre al lado del pueblo francés porque no quiere el poder sólo por el poder sino para restituirlo a los franceses.” Mientras, una experimentada Marine Le Pen con una mirada, que ve más allá de lo visible: las presidenciales 2027, puede esperar que todos se “quemen” en estos dos años y medio de ingobernabilidad o pueden anticiparse las alecciones, por ello declaró “la marea esta subiendo…..esta vez no lo suficiente, pero continúa a crecer: nuestra victoria ha sido sólo postergada”.
Lo que es indudable es que será una Asamblea Legislativa difícil de gobernar, el programa de Mélenchon es preocupante: propone 236 mil millones de euros de gasto adicional cada año, asociados a aumentos masivos de impuestos, que asfixiará la economía productiva, siendo poco europeísta causará un terremoto en ámbito económico, así como comercial. Lo más riesgoso, es la perdida de Occidente ante una islamización galopante, los islámicos constituyen el 10% de la población francesa compuesta por 67 millones de personas. Ha propuesto regularizar a los inmigrantes ilegales, la abolición de las medidas anti-okupación o incluso la liberación de miles de delincuentes para luchar contra la superpoblación carcelaria. El retiro de la NATO para pasar a ser “France séparée”, la jubilación a 60 años.
Si esto sucede en Francia, el nivel europeo, se mueve en otro plano, Rassemblement national de Le Pen-Bardella ha decidido integrar el grupo del Parlamento europeo de Viktor Orban, los “Patriotas por Europa”. Los Conservadores como el ECR, que presiden Meloni aún no se ha pronunciado si hará parte del Partido Popular Europeo PPE con Forza Italia, o se quedará en el ECR, lo que ya respondió a Orban es que no integrará los Patriotas, éstos no votarán por Von der Leyen harán una política de contraposición a la UE. A este punto la abstención del voto a la Von der Leyen en el Consejo Europeo pasado, por parte de Meloni, resulta precioso en el diseño general futuro, adquiere fuerza de negociación para Italia, puede obtener, con su voto este 18 de julio, una vicepresidencia para Italia o un Comisario de su interés. ¡Es la política lindura!
El grupo nacionalista Patriotas por Europa de Viktor Orbán se constituyó al día siguiente de las elecciones francesas en el Parlamento Europeo con 84 eurodiputados. Es el tercer grupo más numeroso del hemiciclo. Lo integran: Vox de Santiago Abascal, Ressemblement National de Marine Le Pen con 30 eurodiputados, Fidesz de Viktor Orbán de Hungría con 10 legisladores, la Lega italiana de Matteo Salvini con ocho, la ANO de Andrej Babiš, con siete, el Partido Liberal de Austria (FPÖ) con seis diputados, el nacionalista holandés PVV con seis diputados. Además, tres legisladores del partido nacionalista flamenco belga Vlaams Belang, del portugués Chega y del Partido danés un diputado. Total de 84 eurodiputados.
El presidente de “Los Patriotas por Europa” es Jordan Bardella, esto se debe al numeroso aporte de diputados, tiene seis vicepresidentes, uno de ellos es el general italiano Vannacci.
A este grupo, que es el tercero en importancia le sigue al grupo de Giorgia Meloni, ECR con 78 diputados, los Liberales Renovar Europa con 76 diputados. Los diputados en esta legislatura son 720.
Mientras tanto Viktor Orban, quien por seis meses guiará la presidencia rotativa de la Unión europea, acaba de iniciar su función este 1 de julio, entre protestas de los miembros del Consejo, ya visitó a Putin y a Xi Jinping, mueve las apacibles aguas de la Unión europea.