Una reunión de Mujeres profesionales, del sector privado, del sector público, de la academia para debatir sobre la corrupción peruana. No era un debate sobre «género» donde se analiza la condición femenina, era, este es el elemento destacable, una reunión donde el «género entra en el mérito», se hace partícipe, tiene una opinión, la manifiesta involucrando en ella a las mujeres que normalmente son espectadoras.
Este es un triste momento en el Perú, se ha constatado la corrupción al más alto nivel en el Poder Judicial y en otras instituciones, la confianza de la ciudadanía hacia las mismas, es mínima.
En la sede de la Cancillería peruana, como anfitriona, la Embajadora Silvia Alfaro, Directora general de Promoción económica, quien acogió la propuesta de la profesora peruana, españolizada, Natalia Manso. Ambas, dieron vida a la iniciativa «Mujeres luchando contra la corrupción.» El objetivo: hablar de un problema que se tiene en casa, reflexionar y «sin vergüenza analizarlo para encontrar soluciones, generar un círculo virtuoso, sector público, privado, academia.» Se requiere que las fuerzas vivas y protagonistas participen activamente para generar una nueva imagen del Perú.
Además, mitigar la repercusión negativa del problema que significa, según el Banco Mundial: 2% del PIB anual del Perú, es decir, 10% del presupuesto anual de la República, ante esta «debacle ética, debemos ser parte activa de la transformación» agregó Natalia Manso.
Una sociedad corrupta impide el desarrollo equitativo, las mujeres son las más vulnerables, la exclusividad masculina de los cargos, de los encargos, los bastiones de poder enquistados en la administración de justicia: es la expresión más injusta de una sociedad.
Si las Mujeres dependen de la voluntad de un hombre corrupto, sea para mantener el cargo o una promoción surge el intercambio de favores sexuales, también cuando deben ir a solicitar al Juez corrupto que resuelva su causa sobre alimentos. El aparato estatal se convierte en su «fundo» desde el cual disponen o desde el cual contratan favores.
En la intervención de Janet Tello Giraldi, jueza titular de la Corte Suprema, se siente una congoja ante el trato, que ella considera «injusto», hacia todos los jueces, «lamentando la situación que actualmente se encuentra el Poder judicial por causa de algunos Jueces….. como si fuera un aluvión nos ha arrastrado a todos y todas …. como si nunca hubiéramos hecho nada por nadie ni por nuestro país…..la gente no cree en ningún juez ni jueza» En realidad, bastaba hacer mención a los jóvenes Magistrados que han permitido que la ciudadanía conociera la calidad moral y humana de aquellos jueces motivo de escándalo, se deben destacar como ejemplo: la Fiscal Rocío Sánchez Saavedra y al Juez Serapio Roque Guamancondor.
Las acciones futuras nos harán conocer aquellos Magistrados alejados de este mal manejo.
Por ello, agregó, el Poder Judicial «ha sido declarado en emergencia por el Consejo Ejecutivo del Poder Judicial para tomar medidas inmediatas como la intervención de la Administración de la Corte Superior del Callao, la suspensión de algunos Magistrados, la remoción de algunos funcionarios, la revisión de los funcionarios de la gerencia del Poder judicial, así como la suspensión de juez de la Corte suprema» se refiere al juez Hinostrosa Pariachi, excluido de cualquier órgano jurisdiccional a la espera de las medidas que se le van a adoptar.
Ante la sufrida y resistente renuncia del Magistrado Duberlí Rodríguez, quien ocupaba el cargo de Presidente de la Corte Superior de Lima, fue elegido en emergencia el Magistrado Prado con quien, la Jueza Tello, refirió «hemos trabajado un plan de cambios urgentes que van desde la repotenciación de la Oficina de Control de la Magistratura (OCMA), se contará con jueces contralores».
La OCMA está compuesta por Magistrados que cumplen la función fiscalizadora sin dejar su carga procesal, lo cual les impide una dedicada labor de control interno, por ello, «están ampliando facultades de inteligencia» así como también llamó al «sector privado» pues el cohecho para que se tipifique tiene diferentes actores y el abogado, el litigante tienen una parte importante en la configuración del delito.
Ya el reconocer que hay una corrupción propagada es un buen primer paso, corrupción enraizada en quienes gobiernan el Poder Judicial: los hombres. La jueza Tello insiste «la gran mayoría de jueces y juezas somos honestos y probos, comprometidos con el respeto de los derechos fundamentales, en condiciones de igualdad.»
Acciones inmediatas como la Visita Judicial a las provincias donde existen 16 Cortes con problemas, los Jueces visitantes dejarán sus funciones jurisdiccionales. Así como la democratización de la elección de los presidentes de Cortes, aplicar medidas que permita la reducción de causas sin resolver haciendo apelo a la promoción de los jueces provisionales, «la Corte Suprema tiene 9mil expedientes, llegando a 13 mil causas aún sin resolver», el presupuesto del Poder Judicial establecido en la Constitución deberá ser respetado.
Una Corte Suprema integrada por 20 Jueces de los cuales, 4 son Juezas. El Consejo Ejecutivo del Poder Judicial lo integran 6 miembros de los cuales 2 son mujeres, una de ellas es la Jueza Suprema Janet Tello.
Ana Teresa Revilla, integró la Comisión Consultiva de Reforma del Poder Judicial presidida por el Embajador Allan Wagner, las propuestas han sido presentadas al Presidente de la República. Ante el fracaso del Consejo Nacional de la Magistratura, se instaurará un Comité de Selección integrado por: el Presidente del Poder Judicial, el Fiscal de la Nación, el Presidente del Tribunal Constitucional, el Defensor del Pueblo y el Contralor de la República. «Se abrirá a concurso público las plazas para nombrar Magistrados con equidad de género.»
Se elegirá una persona externa al Poder Judicial quien dirigirá una nueva estructura del Control Judicial por siete años, trabajará con el apoyo de jueces contralores, personal civil y la Policía.
Los Magistrados deberán presentar Declaración jurada de intereses, Hoja de Vida comprobada así como se examinarán las sentencias emitidas para identificar cómo, dicho Magistrado, ha fallado.
Por último, ante la inacción por parte del Congreso, ante las propuestas legislativas del Poder Judicial, se creará un «Consejo de Estado liderado por el Presidente de la República, integrado por el Congreso de la República, el presidente del Poder Judicial, el Fiscal de la Nación, el Tribunal Constitucional», debe haber un espacio donde se pongan de acuerdo, identifiquen los problemas nacionales y faciliten el trabajo, «un órgano de coordinación de los Poderes del Estado.»
Katia Lung, del Grupo Intercorp, se refirió al comportamiento ético de las personas, los porcentajes de denuncias realizadas de acuerdo a las usanzas y cultura de las diferentes sociedades.
Para Susana Silva, Secretaria de integridad pública de la Presidencia del Consejo de Ministros, Secretaría apenas creada como instancia de gran importancia, según Silva, su creación «se ha demorado mucho», entre sus facultades, «puede establecer lineamientos generales sobre el aparato público, cómo se debe entender la integridad, tiene facultad rectora a nivel nacional en lo que se refiere a la política de integridad, la lucha contra la corrupción técnica y normativa»
Según ella, lo que está en definición es el comportamiento ético, «cómo es que debemos hacerlo, no basta portarse bien», se refiere a los regalos, al uso de los autos del Estado de manera indebida, incurriendo en acciones de peculado de uso, no hay normas claras sobre los regalos, muchas veces regalos incompatibles con la función que ocupan.
Además, no basta denunciar, deben existir «canales adecuados, para evitar represalias», la Secretaria está acompañando la coordinación.
Tienen muy presente el enfoque social, pues la corrupción tiene efectos distintos, desde quién es la víctima, el tema vinculado a la pobreza, hasta llegar al tema de género, «en el caso de los hombres la moneda de pago es económica o un trabajo, la moneda de pago de las mujeres es el cuerpo.»
No hay datos sobre si las mujeres sean menos corruptas de los hombres. Aunque el Banco Mundial tiene un estudio sobre la Policía femenina del Perú, al parecer es la oportunidad que hace caer en este tipo de delito.
Se requiere la paridad en todos los grados de la Magistratura también en la Policía Nacional, con 130 mil policías, sólo el 25% son mujeres, en el rango más alto, de 50 generales hay solo dos mujeres Generalas, insuficiente.
Concluyendo la reunión, Silvia Alfaro, hizo un apelo a la necesidad de caminar junto a los hombres e indicando que en el Servicio Diplomático el 27.44% son mujeres, de la totalidad de Embajadores sólo el 18% son Embajadoras.
Hay mucho por cambiar con la participación de tod@s.
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