Wally Meza San Martín
Froilán Fernández Peredo
Ings. Comerciales, Economistas Especialistas en Estadísticas
Con la colaboración de:
Alfonso Rodríguez Arias; y de Carol Pinto-Agüero Barría y
Ings. Comerciales, Economistas
Aspectos Básicos
Las encuestas consisten en investigar las variables de interés en una “muestra” de sujetos y generalizar sus hallazgos al conjunto de la población (“universo”).
La muestra debe ser representativa del “universo”, basarse en un “marco muestral” actualizado y emplear las técnicas del “muestreo probabilístico” para seleccionarla, lo cual permite medir el grado de confianza (error de muestreo) de las estimaciones obtenidas y garantizar la representatividad del universo, según el tamaño muestral utilizado.
La condición para el acierto de las estimaciones es que la captación de variables se realice con metodologías apropiadas a su complejidad.
En encuestas, en que las unidades a prospectar son “viviendas” o “familias”, las variables simples pueden ser respondidas por cualquier miembro del hogar que sea mayor de edad (por ejemplo, las características de la vivienda).
Las variables complejas, como ingresos y remuneraciones, debe responderlas sólo el perceptor.
Ello no se cumple en la Encuesta CASEN, pues permite que la persona Informante, sea el Jefe de Hogar o cualquier persona miembro del hogar de 18 años o más. De allí los graves errores en la cuantificación de la pobreza por ingresos.
Evidentemente los gustos y opinión política deben ser captados directamente de la persona encuestada. Esto en general se respeta, pero hay casos en que se incurre en el error de indagar con un entrevistado por cuál candidato votará él y peguntarle por quien lo hará cada uno de los demás miembros de su hogar.

Uso de metodologías equivocadas
El sistema de cuotas para elegir una muestra es muy frecuente. Si bien en éste se establece que las entrevistas deben efectuarse a votantes de distinto sexo, diferentes estratos de edad, y de distintos barrios socioeconómicos, la instrucción es completar el tamaño predeterminado en el diseño, de acuerdo a la proporcionalidad de dichos estratos en el universo, sin existir una selección previa de las personas a entrevistar. Es decir, en tales barrios deben entrevistar a tantas mujeres y hombres de tales grupos de edad. Después, con los resultados, presentan sus errores muestrales, aplicando las fórmulas del muestreo probabilístico.
El sistema de cuotas es muy simple y de bajo costo, en comparación a la aplicación de metodologías probabilísticas más sólidas y con sujeción estricta a la teoría estadística.
En el muestreo por cuotas se está seleccionando una de las posibles muestras (llamémoslas “visibles”), pero habrán otras (“invisibles”), relativas al mismo universo, que jamás van a poder ser seleccionadas.
Este método no probabilístico, donde algunas o la mayoría de las unidades del universo tengan probabilidad de selección igual a cero, vicia el proceso de estimación y lo torna errático, y es incorrecto calcular el error muestral, lo cual estas empresas si lo hacen como si se tratase de muestreo probabilístico.
Esas empresas, desde su punto de vista no engañan, sino que están convencidas que el procedimiento es probabilístico y dan a conocer el error de muestreo de acuerdo al cálculo del tamaño muestral y se sorprenden que su predicción electoral estaba muy lejos de la realidad.
Para muestra un botón:
19 de noviembre 2017. Primera vuelta elección presidencial
Candidata Beatriz Sánchez del Frente Amplio, la realidad 20,27%
La Encuesta CEP marcaba 8%.
La Encuesta CERC-Moris le daba 11%
La Encuesta CADEM le daba 14%
La Encuesta Adimark le daba 16%
CADEM realiza 1400 entrevista, 1000 telefónicas y 400 cara a cara.
ADIMARK realiza sólo entrevistas telefónicas, 853 teléfonos fijos y 217 teléfonos celulares. CEP y CERC-Moris señalan que sus entrevistas son exclusivamente cara a cara.
Adimark señala que ellos ofrecen una encuesta rigurosa pero vía telefónica. El no realizar encuestas presenciales le ha significado más de alguna crítica. Roberto Méndez se desmarca afirmando que: “la encuesta cara a cara está siendo cada vez más difícil. El acceso ya no es el mejor porque hay sectores que no dejan entrar a los encuestadores a las casas. Hay otros sectores que son peligrosos para los encuestadores. No es cierto que el cara a cara se puede acceder a todos los sectores. Por teléfonos celulares sí accedes prácticamente al 100% de las personas”.
La mayoría de estas empresas, realizan estudios de mercados, cuyos resultados y predicciones no serán comprobados con la realidad, pero las encuestas políticas de predicción de quien va a ganar si son comprobables y estas empresas se juegan su prestigio y supervivencia en el mercado.
Se advierte que en muestras de selección probabilística, el reemplazo de las NO RESPUESTAS por otros informantes, también distorsiona el Muestreo Probabilístico.
Para reposicionar el uso del Muestreo Probabilístico en Encuestas de Opinión Pública y en Estudios de Mercado, es recomendable que las empresas encuestadoras intensifiquen la rigurosidad en la aplicación de la metodología, utilicen otras nuevas aplicaciones del muestreo, y mejoren las técnicas de captación de respuestas en la realización de las entrevistas.
Una de estas nuevas aplicaciones del muestreo es la “Encuesta Panel” o “de Panel”.
Éste es un tipo de investigación social de carácter longitudinal. Los estudios longitudinales son aquellos en los que se investiga (en nuestro caso mediante encuestas) a un mismo grupo de personas a lo largo del tiempo.
El INE en su Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples del año 1966, utilizaba Encuestas Panel, en que cada cuatro trimestres se rotaba un cuarto de los participantes en ella, para evitar cansar a las familias integrantes del Panel.
Actualmente la empresa “CHILETENDENCIA”, de los hermanos Lavin, con la Facultad Gobierno de la Universidad del Desarrollo, han empezado a conformar un panel aleatorio de 1200 personas en la Región Metropolitana.
La captación de la entrevista, es una gran preocupación, pues la entrevista presencial (cara a cara) está en crisis. Hay frecuentes intentos de entrevistas telefónicas, caso en el cual la selección probabilística tiene que ser muy cuidadosa y se debe limpiar el marco muestral para evitar duplicaciones de personas con más de un teléfono.
También puede pensarse en pagar la entrevista telefónica al entrevistado, lo que requiere del apoyo de las empresas telefónicas para abonar ese pago en la cuenta telefónica de éste.







