Desde noviembre de 2014, la Comisión ha movilizado un volumen considerable de recursos financieros de la UE con un enfoque innovador que maximiza los efectos de los fondos públicos e impulsa la inversión privada. Las inversiones sostenibles, sobre todo en infraestructuras y pequeñas y medianas empresas, se han situado en el centro de la acción política de la Comisión, en especial gracias a un uso más eficiente de los limitados recursos del presupuesto de la UE, junto con medidas encaminadas a mejorar el entorno empresarial general.

El Plan de Inversiones para Europa consta de tres pilares:
En primer lugar, el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas, que constituye una garantía de la UE para atraer la inversión privada. La absorción del mercado ha sido especialmente rápida en el denominado capítulo pymes, en el que el FEIE está logrando unos resultados que superan claramente las expectativas. Para garantizar que se disponga de suficiente financiación para seguir proporcionando financiación a las pymes con el apoyo del FEIE, el capítulo pymes se incrementó en 500 millones de euros en julio de 2016.
En segundo lugar, el Centro Europeo de Asesoramiento para la Inversión y el Portal Europeo de Proyectos de Inversión, que proporcionan asistencia técnica y una mayor visibilidad de las oportunidades de inversión, y de esa forma contribuyen a que los proyectos de inversión lleguen a la economía real.
En tercer lugar, la eliminación de los obstáculos reglamentarios a la inversión, tanto a escala nacional como de la Unión. La Comisión ha propuesto ya iniciativas concretas para ayudar a apoyar las inversiones y facilitar la financiación de la economía real, tales como la reducción de las exigencias de capital para las empresas de seguros y de reaseguros en lo que respecta a las inversiones en infraestructuras. La Unión de la Energía, la Unión de los Mercados de Capitales, el Mercado Único y la Estrategia para el Mercado Único Digital, así como el paquete de medidas sobre la economía circular, contienen medidas específicas que, si se aplican en su integridad, eliminarán los obstáculos, fomentarán la innovación y mejorarán el entorno para la inversión.
La Comisión tiene en cuenta los resultados de tres evaluaciones, en consonancia con su propuesta de reforzar y ampliar el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas (FEIE), que es el elemento central del Plan de Inversiones para Europa.
El Presidente Jean-Claude Juncker ha declarado: «El Plan de Inversiones es nuestra política más emblemática. Ya ha demostrado su utilidad para mejorar el entorno de inversión europeo. Hemos escuchado las primeras experiencias, y hemos aprendido de ellas. Los comentarios recibidos están en consonancia con nuestra propuesta de mejorar, ampliar y reforzar el Plan».
El vicepresidente Jyrki Katainen, responsable de Fomento del Empleo, Crecimiento, Inversión y Competitividad, ha manifestado: «El Plan de Inversiones está dando resultados concretos y está llegando a las personas y a las empresas en toda Europa. Las empresas pueden ampliar sus actividades, contratar nuevos empleados e invertir más en investigación y desarrollo. Los proyectos que el BEI ha aprobado en el marco del FEIE movilizan un total de 154 000 millones de euros en inversiones en veintisiete Estados miembros y apoyan a casi 380 000 pymes. Instamos a los Estados miembros y al Parlamento Europeo a que adopten sin demora nuestra propuesta 2.0 del FEIE para ayudarnos a apoyar la inversión sostenible, con objeto de volver a ofrecer empleo a los europeos y de estimular el crecimiento de la UE.».
Las conclusiones de las tres evaluaciones ya se abordan en la propuesta de la Comisión de duplicar la duración y capacidad del FEIE ampliando, en una primera fase, su duración hasta el final de 2020 y aumentando la inversión total prevista, pasando de 315 000 millones de euros a un mínimo de medio billón. La propuesta ya hace especial hincapié en la contribución del sector privado y en la adicionalidad, así como en una mayor transparencia en la selección de los proyectos. Las tres evaluaciones también apuntan a que existe un gran potencial en el desarrollo de nuevas formas de cooperación entre el FEIE y otras fuentes de financiación de la UE.