Agradezco mucho al presidente Mario Abdo la calurosa y amistosa acogida que me ha brindado a mí ya la delegación que me acompaña. Fue un gesto de amistad que demuestra la gran relación que existe entre Paraguay e Italia.
Agradecí mucho la invitación de venir aquí, pensando que era inaceptable que un Presidente de la República Italiana nunca hubiera venido a Paraguay. Y cuando el Presidente me invitó, inmediatamente dije que sí, por supuesto. Y le agradezco la invitación.
Me complace haberlo podido hacer durante su mandato y es una oportunidad para mí de reafirmar la riqueza, profundidad y amplitud de las relaciones entre Paraguay e Italia.
El presidente Abdo, recién ahora, tuvo la cortesía de dejarme encontrar aquí el buque militar cuya historia contó: fue un gesto de amistad que agradecí mucho.
Enumeró algunos de los vínculos históricos más emblemáticos entre Paraguay e Italia.
Al llegar ayer al aeropuerto de Pettirossi, ya tenía un rasgo de ser italiano en Paraguay.
Luego están muchos paraguayos de origen italiano que son enteramente paraguayos pero mantienen un vínculo espiritual y afectivo con Italia. Hay muchos paraguayos viviendo en Italia. Y estos son elementos de una relación profunda que fortalece nuestra amistad.
Hablamos, por supuesto, de la colaboración a desarrollar entre nuestros países. La economía paraguaya es estable y sólida, y esto anima a nuestras empresas y nuestra intención de solicitarles un compromiso común de colaboración con las empresas paraguayas.
Hay zonas de gran importancia.
Como recordó el Presidente Abdo, Paraguay tiene una producción de energía totalmente limpia, totalmente renovable, lo que lo coloca a la vanguardia de este frente fundamental que es proteger el clima del mundo y transitar rápidamente -paulatina pero rápidamente- hacia fuentes de energía renovable que ya no producen contaminación en la atmósfera. Y este es un frente en el que la colaboración entre Paraguay e Italia también puede desarrollarse de manera amplia, concreta e intensa.
Hay colaboraciones en muchos frentes que pretendemos desarrollar, incluso en el cultural y en lo que acaba de mencionar el Presidente sobre seguridad, contra la corrupción y el crimen organizado.
Hay una gran colaboración en esto.
Todo esto recuerda el fondo, el elemento fundamental de nuestra amistad: la protección de los derechos humanos, la protección de la democracia, la voluntad de paz y la colaboración de la comunidad internacional.
En este momento lleno de tensiones, la referencia a los criterios que tienen en común Paraguay e Italia sobre la forma en que se viven las relaciones internacionales, la paz, la colaboración, la apertura, la ayuda mutua, el entendimiento son un recordatorio particularmente importante.
También hablamos intensamente sobre la relación de colaboración, que debe existir cada vez más, cada vez más intensa, entre América Latina y la Unión Europea.
En los próximos días habrá una reunión en Bruselas entre la CELAC -el conjunto de países de América Latina y el Caribe- y la Unión Europea. Y esperamos, como Italia, que sea una cita de colaboración concretamente exitosa y de desarrollo.
Están en marcha negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea, a las que otorgamos una importancia fundamental, lo que no sólo abre -si se resuelven positivamente con rapidez- perspectivas de gran conveniencia para los países del Mercosur y para los de la Unión Europea, sino que también permite que esta enorme complejo de colaboración económica un papel particularmente incisivo en el mundo, un puntal de la paz en el mundo.
Por todo ello, me siento muy feliz de estar aquí en Asunción, y agradezco al Presidente la invitación, que me permite reafirmar una vez más la amistad que existe profunda, intensa y concretamente entre Paraguay e Italia.