Italia se caracteriza por no poseer recursos naturales y elaborarlos de manera excelsa, eso ha hecho de Italia y de los italianos, los grandes transformadores apreciados a nivel mundial. No sólo, alrededor de estas excelencias han creado un estilo de consumo, han construido las máquinas para su elaboración, han desarrollado un mercado que de otro modo, esos recursos naturales, serían menos internacionales. Hablamos del oro, de los tejidos preciados como vicuña, cashmere, de la salsa de tomate para la pasta, y también hablamos del café, entre tantos otros.

El café llega por causalidad a Trieste, los turcos dejaron algunos sacos de café en su partida, de ahi a la actualidad, Italia importa café de Brasile, Vietnam, de Laos, del Yemen o de la Etiopia. Su mezcla ha dado lugar al café italiano. Un negocio que llega a $90 mil millones, su importancia ha sido demostrada en la Expo 2015.

En efecto, Italia no es autosuficiente en el sector alimenticio y debe importar grandes cantidades de materias primas del extranjero. Por ello, tantas veces, el “made in Italy” tiene una composición del 70% extranjero.

Si entramos en la costumbre italiana, volviendo al café, en su territorio nacional, se encuentran los “Bar” donde se consume el café en pié, el capuccino, el marocchino, el panino, el aperitivo. Un rito para todos los italianos y para quienes no lo son.

En efecto, los pequeños bares representan también al italiano, sus realizaciones son pequeñas, bonitas, lindas, excelsas pero siempre pequeñas. Hasta se hizo muy popular un dicho “lo pequeño es lindo”.

En cambio, un norteamericano Howard Schultz, en un viaje que realizó en Milán en 1983 cuando recién tenía su primer negocio Starbucks, negocio que fuera inaugurado en Seattle en Pike Market Place, con sus dos amigos Jerry Baldwin, un profesor de inglés y Gordon Bowker, un escritor. En dicho viaje Howard Schultz desarrolló el proyecto de llevar a los Estados Unidos la cafetería italiana y fundó la cadena de cafeterías “Il Giornale”, las cuales se unieron en 1987 a las Starbucks.

De este modo, inicia la expansión empresarial, en 1996 en Japón, luego en Inglaterra. Se constituye en el 2008 la Starbucks Corporation y llega a Argentina, Bulgaria, Republica Checa, Portugal, luego Polonia, Países Bajos, Suecia también Hungría , Sudafrica, Perú.

Según Il Sole 24 Ore, en el 2016, la cadena de cafeterías tenía un capital de €86 mil millones y facturaba €21 mil millones con más de 200 mil dependientes.

Para un país, como Italia, que instituyó la primera ley sobre patentes el 19 de marzo 1474 gracias al Senado de la República de Venecia que aprobó el Estatuto de las Patentes, a fin de salvaguardar la protección intelectual, no es fácil digerir que sus dos productos bandera: el café y la pizza no sean ellos, los italianos, los grandes comercializadores sino los norteamericanos con Pizza Hut y con Starbucks.

Lo mejor está por llegar, ante los Bar, los pequeños y lindos, está por desembarcar en Italia el primer Starbucks, el año que viene, el 2018, en pleno centro de Milan, es más en una sede histórica, el Correo, el “golpe” es directo a la costumbre, a la economía de miles de bares, a la tradición y sobre todo al orgullo italiano, lo que ha obligado a Howard Schultz decir “Starbucks no viene a Italia para enseñar a los italianos como se hace el café. No haremos esto, vendremos aquí con gran respeto y humildad demostrando nuestras innovaciones sobre el café. Abriremos un negocio que capturará la imaginación pero antes de todo trataremos de ganarnos el respeto y la confianza del cliente italiano, nosotros debíamos venir a Milán.”

En una ceremonia, invitado el alcalde de Milán, además de todos los más importantes empresarios y dueños de las más importantes firmas del Made in Italy, residentes en el cuadrilátero de la moda,  Schultz presentó su proyecto, recordando nuevamente, su viaje a Milán, su juventud y la inspiración que le ofrecieron las calles de esta ciudad, su enamoramiento por el bar y por el café italiano, inexistentes en los Estados Unidos. Lo cautivó ese espíritu italiano de sentido de comunidad y de humanidad que tiene cada bar además de la relación que la gente instaura con el café, fue el resto que terminó de convencerlo.

Con más de 25 mil cafeterías en 75 países. El 2018 será el año clave para descubrir la concepción Starbucks del consumidor italiano y la respuesta del mismo.

Un mensaje no indiferente hacia todos los países con cultura culinaria. Para Italia, es una constatación, quien pensa en pequeño, se queda pequeño con calidad y quien piensa en grande….., ahora veremos si la calidad llega a fidelizar a los italianos.

Galería de Fotos

Sede del Correo «Le Poste» en Via Cordusio, ahora es de propiedad de Starbucks. Se encuentra en reestructuración.© 2017 Todos los derechos reservados por Isabel Recavarren.
Particular del inmueble de «Le Poste» de Via Cordusio.  © 2017 Todos los derechos reservados por Isabel Recavarren.
Captura de imagen, durante la presentación del proyecto Starbucks.
Captura de imagen de la inspitación del dueño de Starbucks, Howard Schultz.
Howard Schultz, presentando su proyecto. Captura de imagen.