El «maíz» fue la estrella de la EXPO2015MILAN, lo vimos crecer frente al Castello Sforzesco, fue el símbolo de este importante evento. Si deseamos recordar esos inicios tenemos un VIDEO-RECUERDO.
En cambio, el maíz, este mes de julio 2016, ha sido el protagonista del libro “EL MAÍZ: NUESTRO ROSTRO, NUESTRO CORAZÓN” sexto libro de la colección Tonacayotl “Nuestro Sustento”, presentado en el restaurante “Bésame Mucho”, organizado por la Cónsul de México en Milán, Dra. Marisela Morales.
Como ella lo explicó «el maíz es parte de la identidad nacional del mexicano y es la base de su alimentación, nacional, considerado por las antiguas divinidades la sustancia gracias a la cual, fueron creados los seres humanos».
Esta presentación se realizó en la Semana del Consejo Internacional de los Museos, entidad que nació en 1946, se reunieron en Milán los representantes de 130 países para cumplir los objetivos del Consejo «mejorar el dialogo, tutelar el patrimonio existente», la presidenta por México, la Dra. Maria Dávalos estuvo presente.
También estuvo presente el prof. de etnología Alessandro Lupo de la Universidad la Sapienza, Roma, quien ha dedicado su trabajo de investigación a los diferentes aspectos de la cultura mexicana como la astronomía, la medicina de los antiguos indigenas mexicanos, por ello ha recibido el reconocimiento del «Aguila Azteca» de parte de México.

El objetivo era reunirnos para conocer esta nueva publicación, pero ademas, tenía la finalidad de profundizar el conocimiento de las tradiciones gastronómicas mexicanas que traen su origen en las mismas antiguas costumbres indígenas unidas a las costumbres culinarias de los colonos españoles.
Los sabores y los ingredientes, que son la base de los platos mexicanos y que componen esta cocina, considerada como una de las más ricas en el mundo en proteínas, vitaminas y minerales además de estar unida a todas las características culturales, históricas y sociales ya mencionadas, han contribuido a que la gastronomía mexicana haya sido declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en el 2010.
La cocina mexicana tradicional, no es sólo un conjunto de recetas sino un elemento de la identidad cultural que se transmite de generación en generación,

La difusión de los productos tradicionales es una labor de amplio reconocimiento de parte de la Fundación Herdéz. Además de constituir una documentación de gran valor, representa una transmisión de conocimientos que valorizan la nutrición.