La Paz ¿a cuál precio?

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Lo dijo malamente Berlusconi, tal vez, estuvo demasiado “gasato”, después de la sentencia que lo absuelve porque “el hecho no subsiste”, un proceso durado quince años, el proceso “Rubi”, nombre de la joven menor de edad que se encontraba en su casa, identificada, inicialmente, como la sobrina de Mubarak, todo falso, una historia con muchos equívocos mientras él era primer ministro. Han sido quince años en los que Berlusconi no pudo ejercer efectivamente como político.

Por otro lado, son conocidas las externalizaciones de Silvio Berlusconi, las cuales son todo menos banales.

¿Qué fue lo que dijo malamente? Refiriéndose a la culminación de la guerra entre Rusia – Ucrania expresó «yo pensaría que el señor presidente estadounidense, Joe Biden, debería decirle a Zelensky “a su disposición hay, después del final de la guerra, un Plan Marshall para reconstruir Ucrania a partir de 9 billones de dólares, con la condición de que ordenen mañana un alto el fuego, también porque a partir de mañana no les daremos más dólares y no les daremos más armas”. Solo algo así podría convencer a este señor de llegar a un alto el fuego». Refiriéndose a la guerra en Ucrania, Berlusconi criticó el encuentro de Giorgia Meloni con Zelensky: “Si yo hubiera sido primer ministro, nunca hubiera ido a hablar con él porque estamos presenciando la devastación de su país y la masacre de sus soldados y civiles”. Agregando la frase fatídica “bastaba que hubiese dejado de atacar las dos repúblicas autónomas de Donbass y esto no habría sucedido, así que juzgo muy, muy negativamente el comportamiento de este señor».

En occidente, criticar a Zelensky, es entrar en un ámbito sensible, la línea es apoyarlo, ayudarlo y que venza la guerra. La voz discordante de Berlusconi con juicios de valor sobre Zelensky, aunque muchos lo piensen y concuerden, no es el momento de remar en contra.

El viernes 17/Febrero, mientras la presidenta del Parlamento europeo, Roberta Metsola, se encontraba en Roma inaugurando un espacio para motivar a los jóvenes a ser más europeístas, llegó el comunicado del presidente del Partido Popular Europeo-PPP, el alemán Manfred Weber, agrupación política al cual Roberta Metsola hace parte, así como, Forza Italia desde sus inicios. Pocas líneas: “Tras las declaraciones de Silvio Berlusconi sobre Ucrania, decidimos cancelar nuestros días de estudio en Nápoles. El apoyo a Ucrania no es opcional. @Antonio_Tajani y @forza_italia en @EPPGroup cuentan con todo nuestro apoyo. Continuamos la cooperación con el gobierno italiano en temas de la UE.” En la frase “nunca habría ido a hablar con él” Berlusconi critica no sólo a Giorgia Meloni, hacia quien, se sabe, en sus sentimientos prevalece la envidia, sino a todos los líderes políticos occidentales.

El terremoto tuvo reacciones inmediatas, Antonio Tajani, Viceprimer Ministro y Ministro de Asuntos Exteriores, escribió vía Twitter: “Berlusconi es Forza Italia. Forza Italia es Berlusconi. No estoy de acuerdo con la decisión de posponer la reunión de Nápoles. También porque Berlusconi y FI siempre han votado como el PPE sobre Ucrania, como lo demuestran los documentos”.

La Secretaría de Forza Italia, va más allá, además de solicitarle a Weber  reconsiderar su decisión, le pide “no intervenir más en la vida interna de un partido «imponiendo o excluyendo a los dirigentes del mismo. Esto es inaceptable.» Acto seguido Berlusconi escribe “Con el mundo al borde de una guerra nuclear entre Rusia y los países de la OTAN, me critican porque pido que junto con el apoyo a Ucrania, que siempre ha sido compartido y votado por Forza Italia, se abra, de inmediato, una mesa para conseguir la paz. Es un deber para un partido como el PPE. Creo que el tema no se puede aplazar más y pido que se ponga en la agenda inmediatamente en las reuniones del EPP”.

El miércoles 15, Wang Yi, el Consejero de Estado y Director de la Oficina de la Comisión Central de Relaciones Exteriores del Comité Central del Partido Comunista de China, antes de llegar a su destino, la Conferencia de Seguridad en Munich, visitó Francia, el dialogo lo sostuvo con la Ministra de Relaciones Exteriores Catherine Colonna,  en la página del Eliseo no aparece alguna foto con el presidente Emanuel Macron, recordemos los innumerables viaje de Macron a Putin a fin de lograr un Acuerdo evitando la guerra. En esta oportunidad Wang Yi declaró «China está lista para cooperar con la comunidad internacional, incluida la Francia, para promover un recorrido de soluciones políticas y lograr parar el fuego». 

Luego Wang Yi se dirigió a Italia, visitó al  presidente Sergio Mattarella, una Agenda con dos puntos: Un esfuerzo decidido por la paz en Ucrania y el fortalecimiento de las relaciones entre Italia y China. Estuvo presente Antonio Tajani. Wang Yi invitó al presidente Mattarella a China en nombre del presidente Xi Jinping.

La petición de Mattarella fue clara “invitar a China a afirmar su influencia para la paz y el fin de la guerra en Ucrania”, la respuesta de Wang Yi fue positiva “China está lista para colaborar con Italia para la paz mundial y para el desarrollo de las relaciones con la UE: en un mundo «lleno de turbulencias» y con conflictos geopolíticos reapareciendo en Europa, Beijing «cree firmemente que la tendencia hacia la paz, el desarrollo y la cooperación es irresistible” y que no hay lugar para el unilateralismo, el proteccionismo y el hegemonísmo. Beijing «está dispuesta a trabajar con Italia para practicar el multilateralísmo, mantener la posición central de las Naciones Unidas, promover la mejora de la gobernanza mundial y desempeñar un papel constructivo en la paz y la estabilidad mundiales».

La esperanza, ahora, es la presión de China sobre Rusia.

Además, en el 2019, siendo presidente Giuseppe Conte se firmó el primer Acuerdo de la Vía de la Seda, dentro del denominado la “Franja y La Ruta” propuesto por China a Italia, además del aspecto comercial se concentra en dos puertos Trieste y Génova, parte que fue suspendida por Mario Draghi. Ahora Tajani no tiene mucho apuro en renovarlo, tiene tiempo hasta diciembre. Giorgia Meloni no tiene mucho entusiasmo, en su encuentro con XI, su conversación giró alrededor de los temas comerciales y no sobre las Infraestructuras. Como ha dicho repetidas veces Biden, es importante preservar la seguridad de las infraestructuras.

El acuerdo llegará a su fin en marzo ’24, este noviembre se deberá decidir su renovación. Para China, Italia es un punto estratégico en su ingreso a la Unión europea, sostienen que relanzar el comercio es su objetivo. Las exportaciones italianas han aumentado en 5% respecto al ’21, China es el primer socio comercial de Italia en Asia, se espera una mejora en las condiciones de acceso de las empresas italianas al mercado chino.

Tajani agradeció a Wang Yi,  por la fructífera y continua colaboración entre Italia y China en el tema de la reforma del Consejo de Seguridad de la ONU y por la coordinación dentro del Grupo Unidos por el Consenso, del cual China es observador.

Los misterios chinos solicitan cautela, se sabe que el Donbass de Ucrania pretendido por Rusia es Taiwan para China, ¿a cuanto estaría dispuesta a renunciar China a fin de hacer realidad su sueño imperial?. Por lo pronto China ha sustituido a Turquía en la mediación internacional, tantos elementos con un sólo objetivo: la paz. ¿A cuál precio?

La Presidenza della Repubblica incontra S.E. Wang Yi, Consigliere di Stato della Repubblica Popolare Cinese (foto di Francesco Ammendola – Ufficio per la Stampa e la Comunicazione della Presidenza della Repubblica)