La defensa de la multilateralidad y los derechos básicos tienen que ser la prioridad de la cooperación UE-Latinoamérica, según los copresidentes de la Asamblea parlamentaria EuroLat.
Durante la inauguración en Bruselas del encuentro de las comisiones permanentes de la Asamblea Parlamentaria Euro-Latinoamericana, el eurodiputado Javi López, presidente del componente europeo, destacó las «buenas relaciones» entre las dos regiones en términos «humanos, económicos y políticos» y defendió la alianza bilateral como necesaria para la «reconstrucción del multilateralismo, desde el respeto a la soberanía con los derechos básicos como la democracia y los derechos humanos».
Lopez también reclamó el papel de Latinoamérica en una agenda en común con la UE en varios temas: «la salud global, el cambio climático, la igualdad de género, el comercio justo, en tener sociedades abiertas que sean capaces de dar solución a las mayores crisis que enfrenta el planeta».
El presidente del componente latinoamericano de la asamblea, el congresista colombiano Óscar Darío Pérez, también dejó claro el apoyo firme de la asamblea a la defensa del orden internacional en el contexto de la invasión de Ucrania: «Nuestra vocación democrática y de construcción de paz nos impone un desafío de condenar todas las invasiones, […] así como condenar todas las violaciones a la integridad territorial y la soberanía de los estados».
Pérez destacó a su vez que la integración birregional debe «priorizar los mecanismos de cooperación» para que la política social sea «incluyente, supere el enfoque asistencialista, y se oriente a generar resultados sostenibles en materia de pobreza y movilidad social».
En la intervención de apertura, el Alto Representante de la UE para la Política Exterior, Josep Borrell, dijo que el turbulento contexto geopolítico actual -marcado por la guerra de Ucrania- obliga a Europa y Latinoamérica a reforzar su relación: «nos necesitamos químicos» recalcó. Borrell subrayó que la relación cuenta con bases sólidas, que hay que seguir impulsando, a nivel político y económico-comercial, pero también en común mediante una estrategia contra el cambio climático y la transición digital y sin dejar de lado la cohesión social.
Borrell también se refirió a la promoción de la democracia y los derechos humanos, y avanzó la posibilidad de revisar las sanciones de la UE contra el régimen venezolano si hay progresos en las negociaciones en curso entre el Gobierno y la oposición. Mostró apoyo a las conversaciones de paz emprendidas por el Gobierno de Gustavo Petro con la guerrilla del ELN. Reclamó, por último, la liberación de los presos políticos en Nicaragua y reiteró que el diálogo político es imprescindible para resolver la crisis en el país.








