Dos sesiones en el pleno del Parlamento Europeo fueron dedicados a la situación de la Mujer. La primera se refiere a los hechos de Colonia que como manifestara la diputada austriaca Angelika MLINAR ya se habían presentado en el Oktoberfest y ante la denuncia de las agredidas, estas no fueron protegidas debidamente por la policía. La segunda se refiere a la carencia de presentación de la Estrategia de la Unión Europea para la igualdad de género, la cual se ha reducido a un Programa de trabajo de la Comisión para 2016. En ambas ocasiones la Comisaria Vĕra JOUROVÁ estuvo ausente, en su representación estuvo la Comisaria Corina CRETU. Tampoco participó el Consejo. ¿Falta de interés, falta de voluntad política?. En ambas circunstancias hubo un largo debate donde ante una exigencia de atención hacia la Mujer por parte de las Diputadas y también Diputados, predominaron declaraciones desviando la atención hacia la agresión cumplida por los refugiados, inmigrantes y al hecho que la Mujer está abandonando el rol que se le ha establecido desde siempre, lo cual causa estas situaciones. Los eurodiputados volvieron a pedir una Directiva europea sobre la lucha contra la violencia contra las mujeres, como ya demandó el Parlamento en 2014. Lamentaron los escasos progresos en eliminar este tipo de violencia y apelaron a los Estados miembros para que ratifiquen la Convención de Estambul lo antes posible. Dieciséis de los 28 Estados miembros todavía no lo han hecho.
En la primera situación, referida al Acoso sexual y Violencia hacia las Mujeres en los espacios públicos, la Comisaria Cretu señaló la importancia de incluir este tema en el orden del día, siendo «un tema prioritario para la Comisión, no podemos aceptar ni tolerar ningún tipo de violencia, pero debemos tener claro que las cuestiones de seguridad en lugares públicos no hace parte de las competencias comunitarias sino que estas hacen parte de las competencias nacionales. La violencia de genero viola los derechos de la víctima, es una situación de desigualdad entre hombres y mujeres, la violencia machista incluyendo el acoso sexual y la violencia sexual, es inaceptable suceda donde se suceda y en las circunstancia en la que se produzca e independientemente del trasfondo que tengan los autores de esa violencia. Hay que respetar en este sentido los valores fundadores de la UE. El asalto sexual o la violencia sexual no son delitos nuevos o importados, en un estudio de derechos fundamentales la agencia correspondiente señaló que la mitad de las mujeres de la UE habían sido objeto de acoso sexual. Más de una de cada diez mujeres de la UE afirman haber sido víctimas de violencia sexual y una de cada veinte ha sido violada. Tenemos que garantizar que nuestras calles, plazas y estaciones sean seguras para las niñas y mujeres, tenemos que crear un entorno en que las víctimas no tengan miedo de denunciar los casos de violencia o acoso sexual como si hubieran sido objeto, por ejemplo, de un robo. Además, tenemos que velar para que los autores de esa violencia sean perseguidos. Los acontecimientos del 31 de diciembre del 2015 en Colonia han llamado la atención del acoso sexual en lugares públicos, lo mismo las medidas que se han tomado en Alemania, hará más restrictivo el Código Penal y nos parece que sea importante el debate ante los Ministros de Justicia»
Se refirió a la disposiciones previstas en este sentido en el Convenio de Estambul, agregando, «Un problema que tenemos en este momento es que no hay suficientes víctimas que denuncien estos delitos ante la policía. Si tuviéramos más denuncias podríamos reforzar el apoyo a las victimas en los Estados miembros, hay unos derechos concedidos a las víctimas del delito y a sus familias con relación a la información, traducción y apoyo de distintos tipos, durante la investigación y el proceso ante los Tribunales. Tenemos que abordar problemas, necesitan un apoyo especifico y hay que crear maneras especifica para proteger a esas víctimas de sufrir mas daños y ser perjudicadas durante el procedimiento judicial, también hay que velar por la correcta aplicación de la Directiva.
Por ello, financiamos proyectos con la esperanza que tengan un impacto positivo sobre las jóvenes y mujeres en la UE. en este momento tenemos dos propuestas de petición de propuestas y disponemos de una cantidad de más de tres millones de euros que serán dedicados a proyectos nacionales y transnacionales, dedicados a víctimas de violencia, tenemos también tres millones dedicados para luchar contra la violencia y acoso sextual contra la mujer. La igualdad entre los hombres y las mujeres es uno de los valores fundamentales de la UE. Permítanme que les garantice que en los próximos años tomaremos medidas para mejorar y por ende lucharemos contra la violencia ejercida contra la mujer.

A continuación referimos los puntos que contiene la Resolución del Parlamento Europeo, de 3 de febrero de 2016, sobre la Nueva estrategia para la igualdad de género y los derechos de las mujeres en Europa después de 2015.
1. Recuerda que tanto el artículo 2 del TUE como la Carta de los Derechos Fundamentales obligan a la Comisión a adoptar medidas en pro de la igualdad de género;
2. Señala que la Comisión ha expresado en el pasado su apoyo sin fisuras a la adopción de manera clara, legítima, pública y transparente de una comunicación sobre una estrategia para la igualdad entre mujeres y hombres que contara con el respaldo de todas las instituciones de la UE al más alto nivel político;
3. Considera lamentable que el Programa de trabajo de la Comisión para 2016, que se presentó en noviembre de 2015, no contuviera ninguna referencia concreta a la estrategia de la UE para la igualdad de género después de 2015; lamenta que el 3 de diciembre de 2015 la Comisión publicara un mero documento de trabajo de sus servicios titulado «Strategic engagement for gender equality 2016-2019», lo que suponía no solo que fuera un documento interno de menor entidad, sino también que resultara limitado su periodo de vigencia;
4. Se congratula de la publicación por parte de la Comisión de su hoja de ruta titulada «Un nuevo comienzo para afrontar los retos de la conciliación de la vida laboral y la vida privada de las familias trabajadoras», conjunto de propuestas legislativas y no legislativas, en agosto de 2015;
5. Invita a los Estados miembros a asumir la plena responsabilidad para mejorar la aplicación de los principios de igualdad de trato e igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres a escala nacional;
6. Deplora el hecho de que el 7 de diciembre de 2015 el Consejo EPSCO no fuera capaz de ponerse de acuerdo sobre una posición oficial en relación con distintas cuestiones a favor de la igualdad de género, entre ellas la Directiva sobre mujeres en los Consejos de Administración, que el Parlamento lleva aguardando mucho tiempo;
7. Celebra el planteamiento, basado en un compromiso estratégico para la igualdad de género, que la Comisión propone en dicho documento de trabajo, pero lamenta la carencia tanto de valores de referencia concretos como de un presupuesto específico, sin los cuales no puede ni medirse ni producirse evolución alguna en cuanto a los objetivos e indicadores;
8. Pide a la Comisión que reconsidere su decisión y adopte una comunicación sobre una nueva estrategia para la igualdad de género y los derechos de las mujeres 2016-2020 que aborde cuestiones relacionadas con la igualdad de género y sea acorde con el programa internacional, a saber: el documento final de Beijing + 20 (2015) y el nuevo marco titulado «Gender Equality and Women’s Empowerment: Transforming the Lives of Girls and Women through EU External Relations 2016-2020» (Igualdad de género y empoderamiento de la mujer: transformar la vida de mujeres y niñas a través de las relaciones exteriores de la UE 2016-2020);
9. Solicita a la Comisión que colabore con el Parlamento y el Consejo, y pide que se celebre una cumbre de la UE sobre la igualdad de género y los derechos de las mujeres, con el fin de evaluar los progresos realizados y renovar los compromisos en el marco de la próxima sesión del Consejo EPSCO, en marzo de 2016;
10. Recuerda que la aplicación de la legislación y de los instrumentos políticos de la UE debe respetar los principios de subsidiariedad y «valor añadido», que no siempre son necesarias normas uniformes para que el mercado interior funcione de forma práctica y competitiva, y que la Comisión debe tener en cuenta la carga administrativa resultante de sus propuestas legislativas, así como los distintos contextos culturales y prácticas de los diferentes Estados miembros;
11. Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución al Consejo, a la Comisión y a los Gobiernos de los Estados miembros