La estrategia adoptada por la Comisión Europea, que la UE se convierta en un agente más fuerte a escala mundial donde la cultura puede desempeñar un papel crucial para reforzar las asociaciones internacionales.
La cultura puede desempeñar un papel importante en la política exterior de la UE. La cooperación cultural permite rebatir estereotipos y prejuicios al cultivar el diálogo, la amplitud de miras, la dignidad y el respeto mutuo. El diálogo intercultural puede contribuir a la prevención de conflictos y a alentar la reconciliación tanto dentro de cada país como entre distintos países. La cultura puede ayudar a responder a retos mundiales como la integración de los refugiados, la lucha contra la radicalización violenta y la protección del patrimonio cultural mundial. La cultura también puede ser el vehículo para conseguir importantes beneficios económicos y sociales dentro y fuera de la UE.
La Comunicación presentada propone un marco estratégico para profundizar en las relaciones culturales internacionales y hacerlas más eficaces, así como un nuevo modelo de cooperación con los Estados miembros, los institutos culturales nacionales, los operadores privados y públicos de la UE y sus países socios, multiplicando las oportunidades, creando sinergias y maximizando los beneficios socioeconómicos.
La cultura se está convirtiendo cada vez más en un vector del crecimiento económico, no solo en sus formas tradicionales, sino especialmente a través de las industrias culturales y creativas, las pymes y el turismo. Esto refuerza la opinión de que las sinergias con otros ámbitos son cruciales y de que los sectores público y privado y la sociedad civil deberían participar cada vez más.
La cultura desempeña un papel importante también a nivel municipal. Involucrar por igual a ciudadanos, agentes estatales y agentes culturales constituye un recurso primordial para reforzar a los municipios y las comunidades y para desarrollar las oportunidades de mercado.
Esta Comunicación se ajusta a la 9a prioridad definida por Jean-Claude Juncker, Presidente de la Comisión Europea, en sus orientaciones políticas de 2014 y refleja la ambición de la próxima Estrategia Global de la UE que está preparando la Alta Representante. Asimismo, la Comisión ha anunciado que propondrá al Parlamento Europeo y al Consejo de la UE la organización de un Año Europeo del Patrimonio Cultural en 2018.
Horizonte 2020 también apoya la investigación sobre la diplomacia cultural y las actividades sobre el patrimonio cultural, a través de proyectos multinacionales e interdisciplinarios. Se están preparando otros programas que apoyarán en el futuro a los países socios en las distintas regiones, por ejemplo, el fomento de las industrias culturales y creativas y la promoción del diálogo intercultural.
Para ayudar a la UE a aplicar la estrategia y a crear sinergias entre todos los actores de la UE se creó en febrero de 2016 una Plataforma de Diplomacia Cultural, que se centraba en países de importancia estratégica. La Plataforma, gestionada por un consorcio de institutos culturales de los Estados miembros y otros socios, proporcionará asesoramiento sobre políticas, favorecerá la creación de redes, realizará actividades con los interlocutores de la cultura y elaborará programas de formación para los líderes culturales.
Entonces, la «Estrategia de relaciones culturales internacionales» se propone alentar la cooperación cultural entre la UE y sus países socios, así como promover un orden mundial basado en la paz, el Estado de Derecho, la libertad de expresión, el entendimiento mutuo y el respeto de los valores fundamentales.
La Alta Representante de la UE y Vicepresidenta Federica Mogherini ha declarado: «La cultura tiene que ser una parte esencial de nuestra política exterior. Es una poderosa herramienta para tender puentes entre las personas, en particular los jóvenes, y reforzar el entendimiento mutuo, y también puede ser un motor del desarrollo económico y social. Dado que afrontamos desafíos comunes, la cultura puede ayudarnos a todos, en Europa, África, Oriente Próximo o Asia, a mantenernos unidos para combatir la radicalización y a construir una alianza de civilizaciones contra quienes intentan dividirnos. Esta es la razón por la que la diplomacia cultural debe estar en el centro de nuestras relaciones con el mundo actual.»
Tibor Navracsics, Comisario europeo de Educación, Cultura, Juventud y Deporte, ha declarado: «La cultura es el diamante en bruto de nuestra política exterior. La cultura contribuye a promover el diálogo y la comprensión mutua y, por lo tanto, es crucial para construir relaciones duraderas con países de todo el mundo y tiene un gran papel que desempeñar a la hora de hacer de la UE un actor más fuerte a escala mundial.»
El Comisario europeo de Cooperación Internacional y Desarrollo, Neven Mimica, y el Comisario de Política Europea de Vecindad y Negociaciones de Ampliación, Johannes Hahn, han acogido favorablemente la Estrategia, en consonancia con la Agenda 2030, recientemente adoptada, que reconoce la ciudadanía mundial, la diversidad cultural y el diálogo intercultural como principios fundamentales del desarrollo sostenible y para las políticas de la UE en materia de vecindad y ampliación.
